Mi
niña, de grandes ojos negros,
se
acercó a mí cierta tarde,
traía
entre sus manos
una
gran hoja blanca de papel.
Me
la dio, la cogí,
al
principio no entendí.
Pero
me dijo "agua"
e
inmediatamente le hice
un
barquito de papel.
Ella
con una gran sonrisa
esperaba
impaciente
que
terminara aquella creación.
Lo
tomó entre sus manitas,
y
corrió al patio trasero.
Yo
curiosa la seguí,
y
vi con ternura,
que
aquel barquito de papel
flotaba
gustoso
en
un simple bote que
mi
niña había llenado.
Nadie
puede arrancar
la
imaginación de un niño
ni
lo que ella se
habrá
imaginado.
Pues
su barquito de
papel
navegaba quizá
en
grandes océanos.
Para navegar en más barcos pasa a visitar a nuestra amiga Sindel.
.jpg)
10 comentarios:
Qué bonito!!! La imaginación de los niños es algo inagotable y que bueno es poder participar de esos momentos.
Es hermoso que hayas compartido ese “barco” con nosotros.
Cariños….
Que lindo! Esas cosas que tienen los niños que nos iluminan el alma! Hermoso tu barquito!
Un beso.
AAwww que ternura de poema. Un barquito hecho por la imaginación de tu nena, y cargado de su inocencia lo navego por el ancho mar. Preciocisimo!
Saludos
No se necesita un gran barco para viajar, a un niño le basta un barquito de papel, ¿por qué los adultos no podemos viajar con ellos también?
Qué linda historia y tierna tu forma de contarla.
=)
Precioso barquito de papel y más en las manos de un niño.
La imaginación de los niños es lo más bonito que hay. Con tan poca cosa se hace feliz a un niño.
Un abrazo
Muy hermoso el ver y sentir la inocencia de los niños que tras cada gesto esconde una bella historia por la que navegar.
Besos
Una bella historia para crear y contar a un niño. Tierno, muy tierno.
besos
Ese bote, para un niño, un inmenso océano y ese barquito de papel, un velero veloz.
Un fuerte abrazo.
Publicar un comentario